En China, las historias de griefbots están emergiendo debido al aumento de la AI que permite a las personas recrear digitalmente a sus seres queridos (e incluso a sí mismos).
Usando viejas fotos, grabaciones y mensajes, están entrenando programas de chat para imitar a los fallecidos.
El rápido avance de la AI generativa en el último año ha llevado a una nueva era de griefbots que pueden recrear casi exactamente cómo se ve, habla y piensa una persona a partir de pequeños datos.
Muchos están construyendo programas de chat con personalidades y recuerdos de personas fallecidas, con la esperanza de tener una última oportunidad de hablar con ellas.
Luego llegan las apps y así desaparece la distinción entre vida y muerte, como para que dejemos de tenerle miedo a eso y optimicemos nuestra productividad al máximo.
Con apoyo de AI Criptonauta